¡Hola
pitufiamigos! Hoy tengo un montón de cosas nuevas que contaros
porque no os podéis ni imaginar lo que me ha pasado esta semana. El
otro día el malvado Gárgamel consiguió atraparme ¡qué miedo
pasé! pero mientras que estaba encerrado en una jaula pude enterarme
de una cosa muy interesante y no es ni más ni menos que... ¡cómo
pasar al mundo de los pitufihumanos! Jejeje, soy un pitufito genial,
lo se, y también se que os preguntaréis como conseguí tan
pitufisuculenta información, pues os lo voy a contar. Como estaba
diciendo antes, cuando estaba en la guarida de Gárgamel vino Madame
Mim a visitarlo y le estaba contando sobre un viaje que había hecho
al mundo de los pitufihumanos.

No
os puedo decir nada del viaje, solo que yo fui uno de los elegidos
para ir y que durante el paso de una dimensión a otra me dio mucha
fatiguita. Cuando llegamos, lo primero que vimos fue una clase
muuuyyy pitufigrande con muchas mesas libres porque todos los
pitufialumnos se apegotonaban en unas pocas mesas. El pitufiprofesor
dijo que les gustaba el “calor humano” o algo así, ¡eso era una
buena señal!, !todos se quieren mucho¡
Como
no vimos ningún pitufipeligro decidimos escondernos en un cajón de
la mesa del pitufiprofesor a observar, según dijo, la clase duraba
una hora y media y empezó con un juego de preguntas !ojalá pudiera
haber participado¡. Encima de todo tenían regalos los ganadores,
unos cuadernos, unas bolsas naranja butano... De repente, vino una
amiga del pitufiprofesor que quería hacer un test para saber si los
alumnos estaban contentos con él, no se lo que pusieron porque era
secreetoo.
Una
vez terminado empezaron a grabar un gran debate que moderaba una
pitufialumna, el debate era de un tema muy interesante porque dejaba
que los pitufialumnos hablaran sobre los temas que les interesaban
(el paro, los estudios, los profesores...). Me gustaría que en mis
clases hubieran más actividades como esa, porque me encantan los
debates, aunque casi ningún pitufiprofesor los hace. Más tarde
comenzaron a dar la teoría muy rápido porque no tenían tiempo,
mientras, algunos voluntarios cogían notas y rellenaban unas tablas
sobre el comportamiento de los pitufialumnos ante la explicación. La
mayoría no estaban prestando demasiada atención.
La
clase terminó, pero gracias a mis contactos conseguí enterarme que
al día siguiente había otra clase, así que nos dispusimos a
preparar el pitufiplan para el día siguiente.
En
la clase del viernes el pitufiprofesor fue grupo por grupo
corrigiendo las prácticas que habían hecho y, entre el
pitufiprofesor y los grupos, iban decidiendo las calificaciones
obtenidas. Según el pitufiprofesor esto les iba a servir como ensayo
para ser buenos docentes en un futuro. Pienso que muchos de los
grupos no son sinceros en las notas que se ponen ya que les daba
vergüenza decir la nota que verdaderamente creían.
Los
pitufialumnos empezaron una nueva práctica en la que deben estudiar
los datos obtenidos en la práctica anteriror, creo que esta práctica
está muy chula, aunque va a ser difícil, porque cuando yo hago los
trabajos hay muchas cosas que no incluyo debido a que las considera
obvias, aunque por lo que parece, este pitufiprofesor quiere que los
incluyan todo.
Cuando
acabó la clase era la hora de volver a casa. Ya sabemos que los
humanos son buenos y que podemos pedirles pitufiayuda cada vez que lo
necesitemos, menos mal ¡Qué alivio! Para celebrarlo, ¡hicimos una gran pitufifiesta!
No hay comentarios:
Publicar un comentario